ZurruMurru, app y juego de cartas sobre las leyendas vascas

La empresa vasca Flying Dodos ha presentado ZurruMurru, un sistema de juego, basado en 54 cartas físicas y en una aplicación móvil, que sirve para la estimulación de la creatividad narrativa y para el descubrimiento del rico mundo de las leyendas tradicionales vascas que estudió J.M. Barandiaran.

La mecánica del juego es muy sencilla. Los jugadores extraen varias cartas del mazo que representan a los personajes, acciones y objetos más característicos del legendario popular vasco. A continuación, a través de distintos sistemas de juego, deben construir sus propias historias utilizando como elementos fundamentales los conceptos presentes en cada carta. El componente digital viene de la mano de una aplicación móvil, que cuenta con una tecnología de reconocimiento de imagen pionera en el estado, que reproduce contenidos multimedia ampliando la información sobre cada uno de los personajes, objetos y acciones.

La tradición literaria vasca está fuertemente unida a la tradición oral y la capacidad de improvisación. Durante milenios las historias que encerraban la sabiduría popular fueron transmitidas de padres a hijos a la luz del fuego del hogar, sentando las bases de una rica y diversa mitología propia. Por otro lado, la capacidad de improvisación es la raíz de uno de los fenómenos literarios más representativos de la cultura vasca, la bertsolaritza. ZurruMurru toma ambas tradiciones y las traslada al siglo XXI de la mano de las mecánicas más modernas para la estimulación del pensamiento narrativo y la tecnología de los smartphones de última generación.

ZurruMurru se presenta así como un juego de mesa familiar, pero al mismo tiempo también como una poderosa herramienta para la enseñanza de la lengua y la cultura vascas. El juego es, a fin de cuentas, la forma más dinámica y motivadora de aprender y adquirir nuevas habilidades, por lo que no sería de extrañar que dentro de unos meses en muchas aulas de Euskal Herria estén repartiendo cartas y sacando los móviles para asomarse a la tradición de la mano de ZurruMurru.