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Estudiantes de la Facultad de Ingeniería de la Universidad de Deusto ha presentado oficialmente la motocicleta Spider X-15, un prototipo de vehículo eléctrico e inteligente que han diseñado a lo largo de seis meses para participar en la competición internacional “Smart Moto Challenge”. El certamen contempla un primer campeonato del funcionamiento de la moto en julio en el circuito catalán de Montmeló, y un segundo en octubre en Moscú.
La particularidad de “Smart Moto Challenge” radica en que se trata de motocicletas eléctricas y conectadas a Internet, y que es un reto destinado a estudiantes de ingeniería de distintos grados. En el caso de la Facultad de Ingeniería de la Universidad de Deusto participan los grados en ingeniería: Tecnologías de Telecomunicación, Informática, Mecánica, Electrónica Industrial y Automática, Diseño Industrial, Tecnologías Industriales, Organización Industrial y doble grado ADE + ITI.
Es la primera ocasión en la que universitarios vascos participan en este certamen, que celebra este año su tercera edición con la participación de 12 equipos. La Facultad de Ingeniería de Deusto se medirá a seis universidades españolas, siete rusas, una polaca y una de Kazajistán. Los centros españoles incluyen a la ETSEIB (Escola Tècnica Superior d’Engyngeria Industrial de Barcelona-Universitat Politècnica de Catalunya), Escuela Técnica Monlau, Universitat de Girona, EU Salesiana de Sarrià, Universidad de Nebrija (Madrid) y Universidad de La Rioja.
El certamen está patrocinado por la compañía alemana de motos eléctricas Elmoto, que proporciona a todos los equipos un motor, una ECU y las baterías. Partiendo de este punto, los equipos deben diseñar y construir un prototipo de moto eléctrica inteligente y conectada a Internet que cumpla la normativa europea L1E y L3E. De este modo, las empresas disponen de un laboratorio de ideas y de una fuente adicional de futuros ingenieros especializados en el sector.
El equipo vasco está formado por 20 estudiantes y coordinado por cinco profesores, que han invertido 7.000 horas de intensa labor desde que en diciembre pasado formalizaron su inscripción e iniciaron las tareas de definición del equipo y distribución de las tareas.
Elementos comunes y factores diferenciales
De acuerdo con las normas de competición cada equipo recibe como elementos comunes un motor, un pack de baterías y una ECU (Engine Control Unit). De este modo, los participantes marcan la diferencia en la fabricación del chasis, diseño de la carrocería, la adición de elementos diferenciadores así como la implementación de la parte inteligente del vehículo y su conexión a Internet. En el caso concreto de la Spider X-15, la conectividad lleva aparejada el uso de dispositivos para 4G.
El prototipo construido, bautizado como Spider X-15, es un vehículo concebido para su uso en la ciudad, alimentado con baterías de litio-ión, que alcanza una velocidad máxima de 45 Km/h y tiene una autonomía de 55 kilómetros tras seis horas de carga. Se trata de desarrollar una motocicleta ligera y conectada a Internet destinada a servicios de reparto en el ámbito urbano. En este caso, la propuesta concreta se dirige a una empresa de distribución de pizzas a domicilio.
Se trata de la tercera edición de una competición universitaria internacional en la que prima la aplicación de los conocimientos adquiridos durante la carrera, la utilización por parte de los estudiantes de ingeniería y diseño de las más recientes tecnologías, la puesta en práctica de un ejercicio real de ingeniería para el desarrollo de una motocicleta eléctrica ligera y la experiencia del trabajo en equipo y por objetivos. La competición remarca asimismo el valor añadido del diseño y la ingeniería a la hora de estudiar mercados futuros y comercializar un producto, al tiempo que promueve entre los estudiantes habilidades y destrezas que difícilmente se adquieren en el aula. De esta forma, los fabricantes de motocicletas disponen de un laboratorio de ideas y de una fuente adicional de futuros técnicos de mercado y de producto. La asociación con un producto ecológico y sostenible, y su asociación con las nuevas tecnologías de la información y las comunicaciones, es otro de los alicientes de “Smart Moto Challenge”.
La competición consta de varias pruebas, en las que se valoran diferentes aspectos de un proyecto real, que abarca desde el diseño conceptual de la moto hasta su fabricación, puesta a punto y test final, pasando por el diseño y cálculo de todos los componentes mecánicos y eléctricos-electrónicos y de telecomunicaciones. Asimismo, cada equipo debe desarrollar un Plan de Negocio con todas las estimaciones de costes de fabricación y puesta en el mercado de la motocicleta.
ITV, pruebas dinámicas, diseño y Plan de Negocio
La evaluación final del diseño y las pruebas técnicas de todos los prototipos, así como los planes de negocio y marketing, se desarrollarán en el circuito catalán, en paralelo con las 24 horas de Montmeló, entre los días 9 y 12 de julio. Desde la pasada edición, “Smart Moto Challenge” celebra una segunda competición en el marco de la feria tecnológica “Open Innovations”, que tiene lugar en Moscú.
Durante los dos primeros días de la competición, los equipos permanecen en el box para acabar de terminar los detalles necesarios para pasar la ITV. En estas primeras evaluaciones, todos los prototipos deben estar en buenas condiciones para que cumplan la normativa establecida. La prueba del agua es uno de los puntos estrella que determina si aquel producto construido es viable para salir a la calle o no.
Cuando los equipos han pasado la primera fase de la ITV, lo siguiente es llevar las motos al circuito y ponerlas en marcha. Las pruebas dinámica se celebran entre el tercero y cuarto día, e incluyen los test de aceleración, velocidad, autocross y conos. Todos ellos deben ser realizados dos veces, con y sin pasajero. Para evaluar todas estas fases, lo que el jurado tiene en cuenta es el tiempo en que ha corrido cada moto, a partir del cual se hace la clasificación por orden de prototipos más veloces. En la prueba de los conos, derribarlos descuenta una fracción de tiempo determinada.
Finalmente, el último día es la evaluación del diseño, mecánica y electrónica. Llega el momento de defender el prototipo razonando cada uno de los detalles que se ha incorporado, argumentando el desarrollo teórico de este. Parte de esta exposición de hace mediante la presentación del Plan de Negocios, dónde se expone la viabilidad comercial del producto junto con el precio, socios clave, manufactura, etc. La estética y los componentes inteligentes son los puntos principales que destacan en esta etapa de la competición.
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